viernes, 15 de agosto de 2014

Cuando la envidia corroe nuestro ser, por el aparente avance de los que hacen injusticia, violencia y deshonestidades comprendamos que esa apariencia es para destrucción.
Deberemos ser honestos y justos en todo momento, para obtener vida longeva y sin carencias en todo ámbito.
De otra manera estaremos recibiendo el mismo pago de acciones. Claro esto los insensatos no lo comprenderá.

jueves, 14 de agosto de 2014

A fecha podemos presenciar males que aquejan a la mayoría de personas, estos males no llegan fortuita mente sino son ocasionados, por nuestra prioridad de hacer caso omiso a la justicia, honestidad y bondad.
Y con mayor frecuencia cuando por doquier somos impulsados a regodearnos de lo que hacemos con la cortina de falsedad “Que la vida es corta y debemos disfrutarla” lo que no se explica es que es corta para quien decide operar en carácter tal y como hoy vemos a la mayoría.

Exaltando la infamia, violencia e ingratitud con trato injusto y deshonesto para los que nos rodean porque ellos operan en ignorancia, si esta comprensión llega a nuestra vida marquemos la diferencia evidenciando como obtener vida longeva y abundante donde no existen las carencias Espirituales y materiales.

martes, 12 de agosto de 2014

Presenciamos y nos regodeamos en hacer a otros el mayor daño posible, sin el menor atisbo que ese mismo sentir estamos desarrollando para nuestro carácter diario, donde no vislumbraremos bienestar y sosiego sino adversidades. 
Miremos bien con el tipo de personas que hacemos compañías, porque de tales personas tomaremos sus hábitos y costumbres.

De la misma manera nos haremos participantes activos de sus aciertos y errores si otorgamos nuestra aprobación con nuestra presencia.

No olvidemos que seremos influenciados en actuar de la forma presenciada.


domingo, 10 de agosto de 2014

Clamamos por ayuda al padecer más no tenemos en cuenta, si padecemos por consecuencias de lo propinado a los demás en nuestras acciones diarias cargadas de injusticia y deshonestidad porque de esta manera jamás ayuda tendremos desinteresada; podremos  encontrar un llamado a rectificar nuestro proceder.