sábado, 4 de noviembre de 2017

No respondas al necio según merezca su necedad, a menos que pretendas igualarte a él; para recibir el mismo castigo. Responde al necio como merece su necedad. Recuerda, que es de sabios pasar por alto la ofensa. Leales son los golpes del que ama, pero hipócritas del que odia; a tiempo de enmendar advierte el amigo. Hogaño, las ansias de repicar con sandeces a los improperios recibidos, es moneda corriente, pero ello nos hace merecedores iguales al castigo del necio. Preferimos aparentar fortaleza según el pensamiento débil; que oblitera la Justeza en detrimento de la calidad de vida. Al recibir reprimenda bueno es sopesar la veracidad, por si efectivamente debemos enmendar.

viernes, 3 de noviembre de 2017

Muchos buscan el favor del que manda, pero el bien es para el que agrada a Dios. La iniquidad es aborrecida por el Justo, y el de proceder recto es aborrecido por los inicuos. Nadie escarmienta solo con palabras, es menester avatares de la vida que conllevan enseñanzas. Toda palabra de Dios es limpia, no la tergiverses con tus pretensiones o serás un mentiroso. Bulle los obsecuentes, pero contar con aprobación recibida de lo alto perdura, y no añade aflicción. Hogaño, muchos se regodean en lo decadente, defenestrando de lo Justo; analizar bien sino es inquina por nuestra falta de pericia. A fecha, se toma como fuente de ganancias la palabra de Dios, y están culpable el que lo hace como los que lo siguen o patrocinan ese proceder.

jueves, 2 de noviembre de 2017

Los que desean ver accionando a Dios en sus vidas tienen que acudir a la fe primero internalizando su palabra. Pretender primero ver y después creer, es casi como querer ver tu cerebro sin hacerte daño; una tomografía coadyuva siendo ella la fe. Lo manido es alegrarse de la desgracia ajena sin considerar que esta actitud puede revertirse hacia nuestra persona, y erra en cuanto al carácter que pretende ver a Dios. No te impacientes por el auge de los malignos, ni envidies a los impíos. Porque para el malo no habrá buen fin de la vida.

miércoles, 1 de noviembre de 2017

El que habla sin sandeces, procacidad, falsedad e infamia, que ama la pureza de corazón, tendrá como amigo al rey; así como hombre diligente y con pericia en su trabajo. Por cuanto Cristo descubre y revierte lo recóndito de los perversos, no debemos decir me vengaré, sino dar lugar a la Justicia divina. En tiempo de oscuridad Espiritual de Cristo tremolamos la decadencia como virtudes, aunando al proceder que aumenta la languidez. No referimos a religión, sino a calidad de vida pletórica ausente con proceder alejado de Cristo. Inmersos en época instantánea preferimos aliñar a nuestra manera, reduciendo muestro tiempo de vida al no permitir la intervención divina.

martes, 31 de octubre de 2017

Todo beneficio adquirido con componendas, faramallas, triquiñuelas y visos de daño al prójimo, no rinde sosiego y si detrimentos. Acumular tesoros con lengua mentirosa, es vanidad y sombra de muerte. Los que se niegan a obrar con Justicia por la injusticia son destruidos. Quien cierra sus oídos al clamor del pobre, no será escuchado cuando pida ayuda. Hogaño, prolifera el egoísmo, la estima de autosuficiencia que produce actitud beligerante, que impide la bondad y honestidad, pero a pesar de ello debemos actuar en términos Justos para prosperar integralmente.

lunes, 30 de octubre de 2017

Nuestro vientre es colmado con el fruto de lo proferido; muerte y vida está en poder de la lengua, de lo escogido nos atestaremos. El testigo falso será castigado, como el que alienta mentiras. Aparta tu oído o deja de proferir lo que erra a la sabiduría y Justicia, para que pruebes de lo que emana vida; el perverso se burla de la Justicia, y el impío encubre la iniquidad. Lamentablemente, por doquier aliciente tenemos para proferir lo conducente a la muerte; en desmedro de la vida libre y gloriosa, de hacer lo correcto. Hogaño trastocados los valores tenemos como virtud lo decadente.

domingo, 29 de octubre de 2017

El malvado hace caso al labio maldiciente; por no pasar por alto la ofensa que es de sabios, y el mentiroso escucha la lengua detractora; por no cuidar su alma. El que paga mal por el bien recibido, el mal no se apartará de su casa. El de corazón tortuoso nunca hallará el bien, y el de lengua retorcida caerá en desgracia; así como quien sale por fiador de su vecino. Hogaño en disolución moral portamos la existencia ¿Cómo pretendemos poseer buena vida?, cuando no atendemos las tres áreas de nuestro ser. El afán es el área material, y vejamos la Espiritual y moral; ignorando que la Espiritual prima y colma las dos restantes.