Desistir

Contaminas el santuario de Dios con ídolos y aferrado a prácticas espurias y detestables

Eres empedernido en realizar lo que consideras bueno y agradable delante de Dios, pero recuerde, que Dios no comparte su gloria con nadie por eso dice ser celoso.

Al no indagar en su palabra, los intereses mezquinos de la religión dinamizarán a la conveniencia de la religión.

El incentivo para proseguir en lo no grato ante Dios es de gran auge, atractivo y aliciente. Su abandono será cuando llegue tú llamado.

Retribución

Por cuanto no aborrecisteis derramar sangre inocente, la sangre te perseguirá. Tu corazón anda en pos de avaricia tú tierra será asolada hasta erradicar la soberbia del corazón. Tu boca no cumple lo recto proferido.

Ha de llegarte el pago de tú proceder entonces recordarás que advertencias tuviste, para rectificar proceder y alcanzar vida pletórica.

A vida

Si tú adviertes al impío para que se aparte de su mal camino, y él no se aparta, el morirá, por su pecado, pero yo demandaré su sangre de tú mano; la impiedad del impío no le será estorbo el día que vuelva de su impiedad.

Cuando diga al justo de cierto vivirás y el confiado de su justicia hace iniquidad, ninguna de sus justicias serán recordadas, sino que morirá por la iniquidad que hizo.

Dios se agrada de que ambos procedan en justicia y rectitud para vida. Recuerde, que cada uno será juzgado conforme a sus caminos.

Consejo del impío

Inclinas el oído a consejos de un impío, proferir lo apartado de justicia es lo más certero para el impío. No apartarse del camino de justicia, hace prospero y certero el crecimiento Espiritual. Caer en males es asegurado para el que se deja persuadir por la injusticia disfrazada de conveniencia.

Con procederes donde tuerces el derecho del pobre parece muy conveniente, mas resta tranquilidad y sosiego.

No tomes la mentira o falacia para cubrir tus injusticias; el hijo del diablo tiene la mentira como norma de conducta. Ganas más en práctica de justicia que con mentiras al querer disimular tus injusticias.

humildes no altivos

La soberbia hace volcar en humillación y la humildad torna en exaltación, así discurre para aprender que la soberbia es combatida con aquello que nos hace vulnerable y no hace agible tareas simples por si deseas comprender que se requiere de todos para avanzar.

Impertérrito en la postura de soberbia la enfermedad hace el papel de reactivo, para mostrar lo endeble.

Son tres los llamados a la rectitud, culminando con el más severo, no esperemos la parte adusta, para tornar a la humildad.

No regodeo

Al percibir rasgos de consecuencias adversas a tu adversario o enemigo no se eleve sobre ti regodeo por el mal propiciado o no por sus acciones.

Esa Actitud turgente de tú parte puede ocasionar que sobre ti acaezca en tu persona vicisitudes de desaprobación en tal actitud.

Así como la venganza amerita dinero y dedicación en tiempo y esfuerzo, mejor es esperar en la providencia Divina que otorga en tiempo y forma idóneo el merecido correspondiente; esta es la mejor forma de no causar mayor daño que el recibido.