jueves, 16 de enero de 2014

Trabas encontraremos  en toda acción, lo único que tendremos para hacer recta mente es discernir si estas llegan para obstaculizar o advertir de no continuar.

Podremos clara mente saber identificar este propósito teniendo claro, el fin de nuestras acciones que encaminan nuestro carácter y forma de responder delante de las circunstancias de la vida.

Respuesta de nuestro carácter ante circunstancias diarias es lo que denominan los de religiones “Alabanza”.

Entonces todo accionar nuestro esta supe editado a la respuesta Justa o injusta, de practicar Justicia, verdad y bondad  no quitará los tropiezos, pero si tendremos herramientas, poder y sabiduría para superar toda adversidad.
Separación es lo que identifica lo que es útil dentro de un propósito, siendo necesario  la definición  para no confundir roles de veracidad con fingimientos emocionales  o conveniencias.

Mucho despeja el camino saber invertir nuestros esfuerzos,  con personas que estén en la sintonía de querer alcanzar lo mismo que deseamos.

Es frecuente en relaciones interpersonales el fingimiento,  la adopción de lo que no es nuestro carácter hasta lograr un vínculo afectivo con la persona deseada; terrible es mostrar el real carácter pues este no se podrá ocultar siempre.
Se nos hace cosa común recibir respuesta de buena,  regular y mala al valorizar una etapa de vida, olvidamos olímpica mente que el resultado de toda valorización de vida, depende de la suma de nuestras acciones honestas y justas además de la actitud como enfrentamos y no rehuimos a las responsabilidades adquiridas.

Si esto lo tuviéramos  claro no fomentaríamos la injusticia en esta generación egoísta, violenta  y enfocada al mínimo esfuerzo donde queremos más ganancias de lo que puede aportar una acción diaria dando lugar a la depravación del estilo de conducta abundante en todo lo bueno.

Alejemos la mira de nuestras conveniencias  llegando contemplar  en conjunto de lo que nuestro Creador pide de nuestros actos.

                                                                                        
Por merma dela calidad de vida, aun no queremos aceptar que está se ha hecho tan palpable a fecha,  por nuestra s acciones faltas de verdad, bondad y Justicia.

Ya que priorizamos  todo lo posible a nuestra conveniencia sin atender el grado de Justicia, verdad usado para la obtención de nuestros planes. Siendo a fecha la mentira, fraude y violencia nuestras acciones bases de vida decadente.

No queremos accionar dentro de la verdad y procurar el bien a nuestros semejantes porque sabemos que ese no es el modo operativo de los que nos rodean, no atreviéndose a transitar por la senda de Justicia seguimos  la avaricia y egoísmo.

Marcar repudio a lo que está mal, no tolerarlo ni menguando su efecto devastador para nuestra vida, es como obtendremos mejor calidad.

Claro para tal efecto deberemos tener claro que rectitud, veracidad y Justicia no es lo que mejor conviene a nuestra persona sino aquello que está escrito como grato delante de nuestro Creador, esto para los inteligentes que desechan la  evolución de Carlos Darwin de lo contrario siga creyendo en monadas que los fanáticos no se quedan atrás.

Con un estilo de vida que niega sus payasadas circenses dentro de clubes sociales denominados Iglesias, que a lo sumo no pasan de ser congregaciones, a fecha convertidos en verdaderos negocios dirigidos por hábiles empresarios manipuladores.
La estima que nos provoca la vista es fácil ser desviada,  creando consideraciones basadas en lo  que  escuchamos; un comentario positivo o negativo  puede influenciar mucho, más cuando tenemos en menos la fuente de origen de quien propaga el comentario que lisa mente es chisme, esto es cimentado en mentiras.

Poco nos importa ser personas de credibilidad por nuestras acciones Justas rectas aunado a un hablar honesto que nos haga sobre salir a la costumbre mayoritaria, sólo por acrecentar el grado de confianza ante los que nos rodean, para  facilitar el trayecto de vida en convivencia con nuestros semejantes.

Abandonaríamos violencia, egoísmo  y falsedad cuando tengamos que tratar con personas de carácter honesto, de la misma forma cambiaríamos el ambiente al integrarnos con nuestras acciones nefastas en una sociedad honesta.


Dejemos a un lado nuestras con venencias y demos paso a la compasión, misericordia y verdad para comprobar que los frutos de rectitud son mejores que este estilo que abunda en egoísmo y mezquindad e injusticia.
Puede ser que hasta que los que nos rodean vean la Justicia, en todo ámbito de desempeño diario sepan que tratar con nosotros es sinónimo de rectitud, honestidad y verdad en palabras y hechos.


No claudiquemos en el sentir de vivir en Justicia, que al tiempo oportuno recibiremos pago de nuestras acciones.
Cuando vemos esfumarse de nuestras manos, tan rápido nuestras ganancias es porque estamos allanando algo de injusticia, o si estas ganancias nunca parecen terminar necesidad que cubrir esto habla de paz y seguridad  si todo lo realizamos con justicia.

De lo contrario tendremos que analizar toda acción realizada para valorar conforme a la rectitud de nuestras acciones diarias que calificarán nuestro  estilo de vida como lo que es justo delante de quien nos Creó y manual de vida nos escribió para que no nos fiemos en lo que creemos como justicia y nos otra cosa que trapos sucios delante de Él.

Todo el asunto de vida está en  identificar la Justicia delante de Dios y no la estima propia.
Accionar dentro de la jurisdicción de la rectitud, Justicia y honestidad, hace que nuestras acciones sean más llevaderas y fácil de lograr, por evidenciar el carácter de nuestro  Creador.

De no querer probar la honestidad tendremos que transitar está trayectoria de vida en la tierra con  el producto de nuestras acciones invocadas, esto se resume en que la mentira, falsedad originará más de esas acciones.

Que menguará nuestra calidad de vida haciendo que la mentira, injusticia y el egoísmo sea algo normal dentro de nuestro ambiente como hoy.