Para que se
realice lo que se profiere es necesario influir entre los receptores del
mensaje y ejecutores del mismo, por medio de coerción, intimidación o
manipulación pero no fuera de esto humana mente.
Podemos llegar a tal forma de ver realizado lo
que decimos, cuando nuestro pensar y accionar es directa mente enfocado a la
justicia, verdad y bondad que proviene
de lo alto.
Estas
acciones son las que nos hacen merecedores de vida abundante, longeva y pacífica.
No
demoremos en quitar todo estorbo que nos impida discernir lo justo puro y
verdadero de lo injusto, falso y mezquino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario