Nos esforzamos a realizar nuestras acciones diarias, para agradar a los que nos rodean  y dejamos de tener presente  que lo prioritario para el éxito es la rectitud,  honestidad, y Justicia de acciones que proceden de bondad.

Lamentable mente a fecha estamos enfocados a la obtención de todo bien, sin preocuparnos mucho de lo ocasionado a nuestros semejantes en daños o perjuicios con los medios utilizados  donde sólo conocemos los procedentes de maldad y estos tenemos como normales y buenos por no tener contrastes con lo real mente buenos procedentes de Justicia.