martes, 22 de abril de 2014

Respetar las directivas de quien está a cargo de una tarea es lo normal, pero resulta que no respetamos las directivas de honestidad y rectitud de vida cotidiana que produce vida abundante, sino elegimos como bueno lo que produce placer o beneficios palpables.

No sería mal elección de no cuartar la manera  pretendida de nulo padecimiento que pretendemos portar; cuando es precisamente esta decisión  mayoritaria la que produce tantos sobre saltos de vida diaria.

Querer vivir en vida abundante donde todo marche con propósito de bienestar es sujetarse a lo marcado por quien diseño  la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario