Existen situaciones que parecen difíciles, de afrontar con honestidad y rectitud más los grandes caminos hacia la abundancia de vida plena, están camuflados de ardua labor por eso son pocos los que deciden transitarlos.

Los frutos de rectitud son muy preciados, porque todos desean recibir este trato, y pocos ofrecerlo a los demás diaria mente y no podremos recibir lo que no hemos otorgado a los que interactúan con nuestra persona.