sábado, 29 de agosto de 2015

Ser objeto de bondad, misericordia y benevolencia, requiere primero que ofrezcamos a todos por igual y en todo tiempo  tales actitudes y para ello deberemos abandonar el egoísmo recalcitrante, avaricia y envidia actitudes responsables de tanto detrimento.

No es lógico responder con bondad cuando se recibe agresión por la misma persona, mas deja sin medios de defensa al pretendido agresor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario