La sabiduría de lo alto otorga gran entendimiento y amplitud de corazón que evidencia generosidad. Al justo le es inmanente la sabiduría de lo alto, lo más intrincado le es comprensible.
Recuerde, existe sabiduría Celestial, terrenal, diabólica y animal; vilipendio de la primera es manido con elogio de las restantes que conducen al extravió y decadencia.
Conduce a vida pletórica la Celestial que procede de Cristo Jesús y está disponible por fe sin sacrificios.
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