El ambiente es un condicionante de nuestro comportamiento, pero no determinante.
Recuerde, que cada persona trae su camino y puede ser potenciado o no. Empeñemos nuestros esfuerzos para proveer ejemplos de rectitud, fe a Cristo Jesús y la honestidad debida.
Nunca antes los cimientos morales serán más licuados de no aplicar a la nueva generación disciplina debida.
No marcar límites de conducta hace incrementar el mal por falta de lo punitivo; la vara desde temprano hace alejar lo deplorable del niño.
https://crushev.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario