Dios es poderoso y no desprecia a alguien y las misma acciones del perverso le aniquilan y hace justicia sin guardar sus ojos del justo. Reprender al justo de tener malas obras o soberbia abre el oído a la corrección y exhortar a volverse de la iniquidad de escuchar y someterse al carácter a vida longeva de no hacerlo la espada espera cobrar por las acciones inicuas realizadas.
El contar con acciones y personas favorables empieza por ser tú, el que ofrece a los demás las acciones de bien que te gustaría recibir. Encontrar con personas agradecidas y de los otros ayuda a definir a quien es viable ayudar prestamente de tener la capacidad.
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