viernes, 13 de junio de 2014

El dejar crecer la injusticia, mentira e infamia como estilo de vida de nuestros actos es ingrediente principal para obtener todo acto violento, inseguro e injusto que hoy padecemos por obviar la honestidad y justicia, hasta el grado de considerar estás cualidades como deleznables por excluir de todo grupo social.
Todo grupo actual está enfocado en las riquezas materiales, aunque digan otra cosa pues la avaricia, egoísmo y afán de pacer ha llegado a trastocar y corromper todo indicio de rectitud.
Se encuentra menor resistencia en amoldar nuestros hábitos a la injusticia más el pago final de ello es decadencia, angustias y falta de paz, en cambio la rectitud y honestidad ofrece larga vida en paz, abundancia y plena satisfacción de accionar dentro del ámbito para el cual vinimos a la vida en este tiempo a marcar la diferencia,
No todos aceptarán pero ese será nuestra elección.


No hay comentarios:

Publicar un comentario