miércoles, 24 de agosto de 2016

Sabemos si una persona es buena o mala, no es  por recomendaciones, sino por sus acciones dentro de la honestidad, verdad y bondad. Lamentablemente a fecha, se interesa cada uno por su bienestar y no en como poder ayudar al prójimo, aunque nuestro bien esta cuando elegimos ayudar a los demás. Topar con personas fiables es más exiguo.

 La decadencia económica empieza por restar importancia al ámbito Espiritual, pues hemos habituado toda conducta al robo, estafa y violencia así que,  los frutos de las acciones propias muestran que no somos personas fiables, dignas de confianza en un empleo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario