Cimentamos procederes basados en ritos, falsas creencias; pero no en Justicia, honestidad y verdad. Por doquier topamos con  aliciente a realizar lo ruin, aberrante y corrupto; pero pocos son guías para aprender la diferencia entre bueno y malo.

Cuando nuestro proceder provoque el cuestionamiento de ¿Cómo obtener la paz y prosperidad? Y tengamos la respuesta en nuestro proceder Justo, siente la dicha que tu vida deja la impronta  de la Justicia.