lunes, 11 de septiembre de 2017

Al impío sus propios designios lo derribarán, espantos lo saltan en cada paso, su vigor se torna famélico, la enfermedad devora su piel, solo la zozobra, y adversidades puede ver.  Ciertamente así son las moradas del impío, y del que ignora a Dios.

Porque la ira llega a causa de las injusticias  cometidas; avocados a la malicia languidecemos  en todo tiempo, pero volcar hacia la Justicia hace gozar de vida abundante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario