aciago

Por temor a la verdad damos auge a las decadencias presentes, defenestrar e ignorar responsabilidades agrava nuestra estancia sobre la tierra. Pero la mayoría afirma que es ducho este proceder, sin declarar que genera calidad de vida aciaga. En la cotidianidad rehuimos a quien pretenda declarar verdad de nuestros actos, y acogemos con beneplácito a los aduladores. Sabiduría es hacer lo correcto, que no siempre es lo que adula o gusta; pero es acorde al carácter de Cristo, y otorga vida pletórica .