jueves, 19 de abril de 2018
Tribulación
Se suscitan tribulaciones para comprender que, debemos consolar a otros por medio de la consolación con que somos consolados por Dios; cuando la sencillez y sinceridad de Dios, es nuestro proceder cotidiano.
No es la tribulación impronta de comportamiento indebido, sino ocasión para responder con madurez a los creyentes. En palpar que los que aman a Dios todo le ayuda a bien está la madures; pero de reflexión y estima, a los que no creen.
Recuerde, primero creo para ver de Dios actuar en mí vida, no al revés; el tamiz de verdaderos creyentes.
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