Mientras
obedezcamos y practiquemos la frase que
resume a gran parte de nuestro manual de vida larga y prospera, que dice que no
hagamos a los demás lo que no deseamos que los demás nos hagan,, sino más bien
amemos (este no es amor fraterno sino el que procede de hacer lo justo,
verdadero y lleno de bondad) a los demás como a nosotros mismos y casi nadie en
su buen juicio quiere males.
Estamos
observando que nuestro buen o mal desempeño en esta vida, esta regido por el
trato otorgado a nuestros semejantes, por efecto de los frutos provocados con
nuestras acciones.
Sería
inteligente determinar operar dentro de lo que nos otorga larga vida, de otra
forma la vida corta, llena de adversidades y angustias gravita sobre nuestra
cabeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario