domingo, 27 de diciembre de 2015

Deseamos que todo opere en bondad, provecho y honestidad hacia nuestra persona, pero nos atrae más  la diversión que en mayor medida es perversión y detrimento a nuestra vida  en todo ámbito, porque buscamos dañar a otros si esto rinde frutos hacia nosotros,y jamás ser de influencia para el bienestar de quienes conforman nuestro entorno .

Oblicuamos así porque la mayoría de personas actúan con preferencias  hacia lo vil y que conlleva a una vida que languidece en todo momento.

¿Cómo podremos requerir acciones que no perciben de nuestro actuar, a los que interactúan con nuestra persona?
Así de complicado es esperar lo que nunca hemos ofrecido a los demás, puede ser que como aliciente a rectificar algo, se nos brinde  en  bondad pero esto no será para  siempre.


No hay comentarios:

Publicar un comentario