Ante una
corrección de nuestro proceder diario, nuestra actitud es primaria mente es la
de no escuchar, desestimar peor si es
percibida en un tono hostil esa corrección.
Ahora que
casi todos ignoran lo justo, verdadero y misericordia es difícil toparse con correcciones que encaucen nuestra vida
bajo estos preceptos de vida abundante.
Lo habitual
es corrección respecto a oficios y responsabilidades sin comprender
que atendiendo la correcta aplicación de los preceptos de vida toda corrección
sobraría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario